ENTRE LOCKERS
Maylon Piraquive, Jugador del Pichurias, nuevamente haciendo escandalos en la calle.
Este equipo que ha llegado a la final, tiene que controlar a su jugador para que no tape la luz de sus éxitos con el fango de la porqueria personal de este jugador.
Ahora bien, la fábrica de Maylon salió sin problema de la demanda por las salchichas pasadas, resulto ser que la carne utilizada en dichas salchichas si eran de cerdo, y que no estaban pasadas, la culpa fue de la salsa mi lonchito, y las autoridades ya tomaron cartas en el asunto sellando de por vida a dicha fabrica de salsas.
Pero Maylon, aprovechó la publicidad del escándalo para penetrar nuevos mercados. Pero esto mismo fue lo que le trajo problemas graves. Resultó que la produccción del mes pasado era muy alta, y habia comprado toda la producción de marranos de la Hacienda "Clarisa". El problema fue que muchos marranos no salieron aptos para el consumo humano, su piel estaba llena de hongos, y portaban un parasito mortal para el hombre. Al parecer los dueños de la hacienda descuidaron la crianza de dichos cerdos por lios familiares. Maylon, por el afán de cumplir los contratos, llegó entonces a los basureros municipales a comprar cerdos como loco. Al ver que no habian suficientes cerdos, y por pensar en la millonaria multa si no cumplía el contrato con el convento "Las carmelitas preñadas", optó entonces por contratar una manada de gamines para que cazaran gatos de la calle y poderlos procesar como salchichas. Y fue aqui cuando saltó el escándalo a la calle y se destapó la olla. Un vecino de la fabrica denunció que en la fabrica se escuchaban mas que simples gritos de cerdo como comúnmente se escuchaban en la noche, sino que comenzó a escucharse aullidos de gato moribundos, y fue entonces cuando se asomó por la ventana de su apartamento y vio algo horrible. Vio al gerente de la fábrica, a Maylon, en chanclas, en bata gotiada de sangre, y matando un gato a escoba limpia, después de reventarlo contra una pared, lo tomó del piso, y lo metió a la máquina para que fuera procesado.
Esta madrugada después de la denuncia la fábrica fue intervenida y efectivamente encontraron varios guacales con gatos enfermos, hacinados, y en condiciones sanitarias muy desagradables. Maylon al ver que lo pillaron con las manos en el gato (el tipo estaba como enfermo porque primero los masturbaba y despues lo mataba), salio histérico echando madres y repartiendo escoba limpia, alegando que era propiedad privada.
En la fiscalía Maylon dijo que fue un acto desesperado, y que no lo volverá a hacer, aunque lo más seguro es que le quiten la licencia. Además aseguró que les tocaba sus partes a los gatos para relajarlos y que murieran en son de placer. El abogado de Maylon alega locura para que lo dejen libre. La Chilindrina seguirá pendiente de este caso.
Este equipo que ha llegado a la final, tiene que controlar a su jugador para que no tape la luz de sus éxitos con el fango de la porqueria personal de este jugador.
Ahora bien, la fábrica de Maylon salió sin problema de la demanda por las salchichas pasadas, resulto ser que la carne utilizada en dichas salchichas si eran de cerdo, y que no estaban pasadas, la culpa fue de la salsa mi lonchito, y las autoridades ya tomaron cartas en el asunto sellando de por vida a dicha fabrica de salsas.
Pero Maylon, aprovechó la publicidad del escándalo para penetrar nuevos mercados. Pero esto mismo fue lo que le trajo problemas graves. Resultó que la produccción del mes pasado era muy alta, y habia comprado toda la producción de marranos de la Hacienda "Clarisa". El problema fue que muchos marranos no salieron aptos para el consumo humano, su piel estaba llena de hongos, y portaban un parasito mortal para el hombre. Al parecer los dueños de la hacienda descuidaron la crianza de dichos cerdos por lios familiares. Maylon, por el afán de cumplir los contratos, llegó entonces a los basureros municipales a comprar cerdos como loco. Al ver que no habian suficientes cerdos, y por pensar en la millonaria multa si no cumplía el contrato con el convento "Las carmelitas preñadas", optó entonces por contratar una manada de gamines para que cazaran gatos de la calle y poderlos procesar como salchichas. Y fue aqui cuando saltó el escándalo a la calle y se destapó la olla. Un vecino de la fabrica denunció que en la fabrica se escuchaban mas que simples gritos de cerdo como comúnmente se escuchaban en la noche, sino que comenzó a escucharse aullidos de gato moribundos, y fue entonces cuando se asomó por la ventana de su apartamento y vio algo horrible. Vio al gerente de la fábrica, a Maylon, en chanclas, en bata gotiada de sangre, y matando un gato a escoba limpia, después de reventarlo contra una pared, lo tomó del piso, y lo metió a la máquina para que fuera procesado.
Esta madrugada después de la denuncia la fábrica fue intervenida y efectivamente encontraron varios guacales con gatos enfermos, hacinados, y en condiciones sanitarias muy desagradables. Maylon al ver que lo pillaron con las manos en el gato (el tipo estaba como enfermo porque primero los masturbaba y despues lo mataba), salio histérico echando madres y repartiendo escoba limpia, alegando que era propiedad privada.
En la fiscalía Maylon dijo que fue un acto desesperado, y que no lo volverá a hacer, aunque lo más seguro es que le quiten la licencia. Además aseguró que les tocaba sus partes a los gatos para relajarlos y que murieran en son de placer. El abogado de Maylon alega locura para que lo dejen libre. La Chilindrina seguirá pendiente de este caso.
1 Comments:
Y qué, no había gatas también en los guacales? De esas todas gasolineras?
By Anonymous, at 10:37 AM
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